La situación no está controlada en la cárcel de Tacumbú, donde el clan Rotela mantiene de rehenes al director del penal y a 23 guardiacárceles. Además, 30 mujeres permanecen adentro por voluntad propia con sus respectivas parejas.

El Crio. Osvaldo López, director de prevención de seguridad, confirmó que durante la madrugada ya no hubo ninguna liberación de las personas retenidas por los delincuentes del clan Rotela dentro de uno de los pabellones de la cárcel.

Luis Esquivel, director de la Penitenciaría de Tacumbú y otros 23 agentes penitenciarios están bajo el poder de los criminales, quienes, desde ayer exigen la presencia del ministro de Justicia, Ángel Barchini.

No obstante, los pedidos aumentaron hoy e incluyen, la reapertura a nuevos ingresos al penal, a fin de que más miembros del clan Rotela puedan llegar allí. Además, la suspensión de la intervención prevista.

El perímetro de la cárcel ya quedó a cargo de la Policía, no obstante, los militares permanecen alertas ante cualquier eventualidad. Otro inconveniente es la falta de energía eléctrica en gran parte del predio.

El obispo Adalberto Martínez acudió anoche de manera voluntaria, para ofrecerse a conversar con los reclusos y mediar para que liberen a los rehenes, pero las autoridades no les permitieron pasar, por una cuestión de seguridad.

A esto se suma que los demás internos llegaron hasta el portón de acceso del penal, es decir, están a un portón de la calle, punto hasta el cual nunca se les permite llegar.