Una familia vivió momentos de terror en el IPS, donde, según la denuncia, le inyectaron leche en las venas a un bebé. La administración apartó a las enfermeras implicadas y pidió sinceras disculpasEn un comunicado emitido anoche, el IPS hizo alusión a la denuncia recibida por parte de una madre, quien reprochó el proceder de unas enfermeras, que supuestamente inyectaron leche a un bebé de un año, quien posteriormente convulsionó por varios minutos y quedó morado por falta de oxígeno, sin un médico que lo asista.

El presidente Jorge Brítez dispuso separar de sus funciones a las funcionarias involucradas y abrir un sumario para determinar responsabilidades y esclarecer los hechos.

 

“Lamentamos profundamente lo ocurrido y ofrecemos nuestras sinceras disculpas a la familia afectada”, expresó el doctor.

“Con estas disculpas no puedo olvidar el mal rato que pasó mi hijo; pudo haber sido algo fatal. Ni siquiera contaban con médicos de guardia en ese momento; fue una desesperación total. Qué experiencia tan horrible”, respondió la madre.El menor ahora se encuentra estable, según el informe médico. Además, recibe todas las atenciones necesarias, luego del episodio que pudo terminar en muerte.

“Como presidente del IPS y como médico, rechazo categóricamente cualquier acto que ponga en riesgo la salud de nuestros asegurados”, afirmó Brítez, al tiempo de señalar que, el compromiso es mejorar la calidad de vida de todos.

El titular anunció que, de confirmarse la falta, se aplicará todo el rigor de la ley, además de dar colaboración en las investigaciones.