Si llega a ser condenado saldría libre a los 22 años.
Según las declaraciones del adolescente, el pasado 30 de agosto había desparecido el arma reglamentaria del policía Hugo Fariña, quien sospechaba que el joven la robó, ya que era el único extraño que ingresaba en su vivienda ubicada en el barrio San Miguel de Villarrica.Por temor a represalias el adolescente planeó asesinar al uniformado y el siete de setiembre ingresó a la casa por una de las ventanas, llevando consigo un arma calibre 22.

Una vez en el interior de la casa disparó a Fariña, lo que alertó a los demás miembros de la familia, por lo que decidió matar a todos.