El capataz de la estancia Taguato, donde ocurrió un cuádruple homicidio, dijo a los investigadores que la banda de abigeadores le obligó a formar parte del robo del ganado, porque amenazó con asesinar a su familia y le prometió una suma de dinero a cambio.

El fiscal Andrés Arriola dijo a la prensa que el cuádruple crimen se debió a negocios y dinero, y que los autores integran una banda de criminales que ya habrían cometido un hecho similar en el pasado en un establecimiento ganadero, donde dos personas se salvaron al huir hacia el monte. “Es una banda que (incluso) asesina criaturas para robar”, lamentó.

El investigador afirmó que ya tienen identificado al cabecilla del grupo que habría propuesto inicialmente el “negocio” al capataz de la Estancia Taguató (Chaco). No quiso aún dar a conocer la identidad para evitar entorpecer el operativo de detención.

El trabajador de la estancia contó a los investigadores que “hubo una propuesta de: ‘vamos a matar al patrón para vender los animales’”, según indicó el fiscal Arriola.

Tras haber recibido la propuesta, los malvivientes comenzaron a coaccionarlo y amenazar con asesinar a su familia, reportó a su vez el Comisario Cándido Gómez, director general de Investigaciones de la Policía Nacional.

Durante el crimen de la familia, el capataz estaba con su esposa y sus tres hijos en la estancia, pero todos estos refirieron no haber visto nada. El hombre, su esposa Elizabeth Duarte y el exesposo de esta, Edelio Yegros, fueron detenidos hoy en Fernando de la Mora. El último hombre está siendo investigado porque es quien alquila la vivienda donde estaba el matrimonio.

Alcibiades Desiderio Ayala Coronel (71), Francisca Nidia Núñez Romero (71) y sus nietos de 10 y 7 años son las víctimas fatales del horrendo ataque. Los cadáveres se encontraban encimados en una fosa y los cuatro estaban en estado de putrefacción, pues se presume que el crimen se habría cometido el pasado martes 9 de julio.

Al menos 100 cabezas de ganado vacuno habrían sido llevadas de la estancia Taguato, además de cuatro armas largas entre rifles y escopetas. Parte del lote de las vacas fue encontrado en el frigorífico Athena Foods (ex JBS), ubicado en la ciudad de Belén, Concepción.