Una adolescente de 13 años se habría intoxicado con alguna sustancia alucinógena en el colegio, es lo que denunció su abuela ante la comisaría del barrio Obrero de Ciudad del Este. Se trata de una alumna del noveno grado que está bajo cuidado de la abuela.

La denunciante relató que su nieta se sintió mal estando en el colegio, siendo llevada por sus profesores hasta el Pabellón de Emergencias para su atención. Fue atendida y dejada en observación por unas horas para luego ser dada de alta.

La mujer dijo al personal policial que encontró en el aparato celular de su nieta un vídeo donde aparecía un compañero de la citada alumna, manipulando un polvo, en una mesa supuestamente del colegio y que habría sido la que dejó en mal estado a su nieta.

De acuerdo al reporte del personal policial, el director del colegio se comunicó con la abuela para informarle que la adolescente se sentía mal. No obstante, tanto el director como la profesora a cargo del proyecto, al verla mal, la llevaron al hospital en el vehículo de la docente y cuando estaban saliendo de la institución llegó la abuela y fue con ellos.

El licenciado Miguel Ángel Goitia, director del colegio, dijo a La Nación/Nación Media que, al recibir el informe del personal de salud de que ya estaba mejor, que podría tratarse de un cuadro de ansiedad, él y su equipo de docentes se retiraron sin que sospechen sobre alguna cuestión relacionada a alucinógenos.

Informó además que, ayer por la tarde, el curso de la citada alumna estaba haciendo chipas, como parte de un proyecto escolar de Semana Santa. Agregó que recién hoy se enteró de la denuncia ante la comisaría y fue hasta la sede policial para conocer mejor al respecto y ponerse a disposición. Detalló que si es verdad la existencia del vídeo, tendría que verlo para tener más datos.

Igualmente, como parte de su averiguación de lo que pudo haber sucedido, explicó que el padre de una alumna le informó, según relato de la hija, que sí estuvieron manipulado un polvo acaramelado color celeste que consumen normalmente y pusieron en la mesa para sacar imágenes.

“No obstante, tenemos circuito cerrado de grabación, ya con la investigación veremos de qué se trató realmente”, expresó el director.