El médico forense Héctor Meza dio detalles de lo ocurrido durante un asado en una vivienda de Capiatá, donde un joven de 26 años falleció tras la explosión de un objeto que arrojó entre las brasas de la parrilla.

Héctor Meza dijo que lleva 15 años como médico forense del Ministerio Público y que lo ocurrido en una vivienda de Capiatá, donde un grupo de personas estaba haciendo un asado, le sorprendió bastante.

“Nunca pensé encontrarme con el evento que tuvimos el viernes pasado. Nos dijeron que explotó algo en una casa y que una persona falleció”, relató en contacto con radio Monumental 1080 AM.

En la casa, un joven de nombre Rodrigo Verón (26), que estaba con un grupo de amigos cocinando un asado, encontró una esfera de metal y dijo que se trataba de “esos artefactos modernos que se usan para que el fuego del asado dure más tiempo” y arrojó el objeto a las brasas de la parrilla.

Poco tiempo después, se acercó de nuevo a la parrilla y el objeto le explotó en la cara.

“Con seguridad, cuando él llegó al piso ya estaba muerto. La destrucción fue total, es como si una bala de cañón te acierte en el ojo”, prosiguió.

El forense describió el objeto como una semiesfera de aleación, muy parecida al cromo o a “esas aleaciones que se encuentran en las metalúrgicas”. Además, describió que tenía unas inscripciones que parecían adornos.

La otra mitad quedó incrustada en la pared de la casa.

El objeto tiene unos 10 centímetros de diámetro por cinco centímetros de radio, es como una pelota de tenis, describió Meza.

Agentes de la Fuerza de Operaciones Policiales Especiales (FOPE) no lograron identificar de qué objeto se trata.

Mientras que el forense está intentando llegar al origen del artefacto, pero sin éxito hasta ahora. “Hasta hoy no sabemos qué es ese objeto”, puntualizó.

Comentó que su investigación inició con una llamada al dueño de la casa, quien le explicó que ese artefacto pertenecía a una inquilina que ya salió de la vivienda, pero el hombre le facilitó el contacto de la mujer y se puso en contacto con ella.

“Ella me dijo que ese artefacto lo encontró en el baldío que estaba frente a la casa, donde su hijo estaba jugando. Su hijo le dijo que encontraron una pelota de metal. Ella se la sacó, la dejó sobre de la muralla y eso allí quedó”, sostuvo.

Pasó el tiempo y ese artefacto quedó allí hasta que el grupo de personas, que estaba pintando la casa, tocó el objeto.

“Es tan importante saber qué era ese objeto y también nos deja la enseñanza de no estar lanzando cualquier cosa al fuego”, reflexionó Meza.

La causa de muerte de Verón fue “traumastismo de cráneo encefálico severo por herida de proyectil”.