Santiago Peña apoya la candidatura de Alliana para el 2028
«Les aseguro que ustedes van a ver en el 2028 a un ñeembuqueño sentado en el Palacio de López», dijo Santi en Pilar. El presidente quiere tranquilizar las aguas al interior de Honor Colorado tras la muerte de Lalo Gomes.
Santiago Peña dio su respaldo este viernes a la candidatura de Pedro Alliana para 2028, la primera vez que hace explícito el apoyo a su número dos en el Ejecutivo. El presidente quiere tranquilizar las aguas al interior de Honor Colorado y encumbrar a su vicepresidente en medio de la crisis desatada por la muerte del diputado Eulalio «Lalo» Gomes.
«Les aseguro ustedes van a ver en el 2028 a un ñeembuqueño en el Palacio de López», dijo Peña en la ciudad natal de Alliana, Pilar, donde fue a hacer su día de gobierno en el departamento, como lo tiene fijado cada viernes. Santi agradeció a su vice y lo describió como su «compañero y hermano».
El mandatario halagó a Alliana por su función como gobernador de Ñeembucú, diputado y presidente del Partido Colorado. «Se vienen cosas grandes y escuchar que están haciendo todas estas obras me hizo pensar que Ñeembucú podría ser la capital del país», apuntó el presidente. Parte del proyecto político que llegó al poder en agosto de 2023 es que luego de Peña, su vice lo suceda al frente del Ejecutivo dentro de cinco años.
Desde que inició el gobierno, Peña se enfocó en los asuntos internacionales y en las tareas institucionales, pero quien hace el trabajo político con las bases es Alliana. Esa dualidad, en determinadas ocasiones, puso incómodo a Peña, aunque en la última semana el vice optó por ser orgánico en la decisión de respaldar a las autoridades que tuvieron participación de alguna u otra manera en el procedimiento que culminó con la muerte de Gomes cuando allanaban su casa en Pedro Juan Caballero.
Alliana es el que tiene la tarea de oficiar como nexo entre el Ejecutivo y el Congreso, teniendo más cercanía con los diputados, los más molestos con el actuar de la Policía Nacional y la Fiscalía. Por primera vez, el vice les dio la espalda y resolvió posicionarse junto al Gobierno, que desde el vamos blindó al ministro del Interior, Enrique Riera, al comandante Carlos Benítez e incluso al fiscal general Emiliano Rolón.
El mensaje de Peña en Ñeembucú puede pasar la página en lo que respecta a las tensiones internas impulsadas por Diputados, pero también cierra el juego para aquellas figuras que también evaluaban lanzar su candidatura para la presidencia de la República, con el respaldo de Honor Colorado.
Aparte de Alliana, el titular de Diputados, Raúl Latorre y el ministro de la Vivienda, Juan Carlos Baruja, desean sentarse en el sillón de López. Pero el primero se abrió a la posibilidad de acompañar al extitular de la ANR en la chapa, mientras que el segundo intenta hacer su camino para suceder a Peña. La declaración del presidente también demostró que el conflicto por tenerla a Lea Giménez en su gabinete también quedó en el pasado.
A pesar de que Alliana negó que pidiera la cabeza de Lea, fuentes internas del Gobierno contaron que el vicepresidente tenía mala relación con la exjefa de gabinete, ya que ella le habría recomendado a la plana mayor de Honor Colorado que le soltaran la mano a Montserrat Alliana, denunciada por nepotismo en la cámara de Diputados.