La docente Shirley Ferreira, exprofesora de informática y robótica del Colegio San Cristóbal, denuncia que fue despedida tras alertar a los padres de un estudiante sobre un accidente en el aula, cuando un ventilador antiguo cayó sobre un alumno durante una clase en agosto del año pasado.

La institución, que depende de la Arquidiócesis de Asunción, enfrenta ahora un proceso judicial interpuesto por la docente Shirley Ferreira.

La misma relató al canal GEN que, tras el accidente, informó a los padres del niño afectado, quienes tomaron fotos del ventilador dañado. A partir de entonces, afirma que fue blanco de represalias, comenzando con el bloqueo de su acceso al sistema interno y una desvinculación de IPS, lo cual afectó su acceso a tratamiento médico para la esclerosis múltiple que padece.

Según su testimonio, la institución justificó su desvinculación administrativa indicando un “retiro voluntario”, lo cual Ferreira desmiente categóricamente, al asegurar que su desvinculación fue unilateral y sin mediación.

Actualmente, Ferreira lleva adelante una demanda laboral, civil y comercial, buscando justicia y responsabilización por el trato recibido, especialmente considerando que su condición médica requiere un tratamiento continuo.

“El colegio es extremadamente precario. El ventilador que se cayó era de los años 50. Lo dejé en evidencia, y eso desató la persecución en mi contra”, sostuvo Ferreira. Agregó que la institución nunca le proporcionó una justificación formal para su despido.