El intendente Gustavo Penayo ratificó la resolución municipal que prohíbe la realización de todo tipo de eventos alusivos a Halloween los días 30 y 31 de octubre dentro de la jurisdicción de Caapucú. La medida, según el jefe comunal, busca preservar las “tradiciones culturales y espirituales” del distrito.

El artículo 1 de la resolución municipal dispone expresamente la prohibición de “toda clase de fiestas, eventos o actividades públicas o privadas alusivas o conmemorativas a Halloween”. Penayo sostuvo que la mayoría de los ciudadanos respaldan su decisión y que no permitirá manifestaciones que, a su criterio, representen “adoraciones al diablo”.

“Yo me hago responsable, a mí me pide casi toda la gente. La mayoría está aplaudiendo. Estoy seguro de que el sentido de los paraguayos no es la libertad para una adoración al diablo en absoluto”, expresó el intendente en entrevista con radio Universo 970 AM.

Penayo reconoció que su postura puede ser considerada inconstitucional, pero aseguró que está dispuesto a asumir las consecuencias. “Me critiquen o no, me digan que raya la inconstitucionalidad o no, me hago cargo. Caravanas o vestimentas de San La Muerte o ese tipo de adoraciones en la calle al maligno no vamos a permitir”, enfatizó.

El jefe comunal incluso anunció que, al igual que en los operativos contra el abigeato, saldrá personalmente a controlar junto a otros ciudadanos para impedir celebraciones relacionadas con Halloween.

Sin embargo, la decisión generó debate en torno a la libertad religiosa e ideológica, garantizada en el artículo 24 de la Constitución Nacional, que reconoce el derecho de toda persona a profesar libremente sus creencias, siempre dentro del marco legal.

Mientras algunos habitantes celebran la medida como una defensa de los valores locales, otros cuestionan la intromisión del municipio en asuntos de libertad individual y cultural. La polémica resolución promete seguir dando que hablar a medida que se acerque la fecha de la festividad.