Una investigación policial sacó al descubierto que las menores que denunciaron haber sido raptadas en la mañana del domingo, y que desconocidos habían intentado violarlas, en realidad estaban de paseo.

Se trata de dos menores de 12 y 11 años; y una mayor de edad, todas domiciliadas en el barrio Ykua Ka´aguy.

Las jóvenes habían desaparecido en la mañana del domingo, de inmediaciones de la capilla San Francisco de Asís.

Ayer, los agentes policiales llegaron hasta un almacén, donde supuestamente las mismas llegaron a comprar analgésico, previo a ser raptadas, el hecho fue negado por el dueño del negocio. Seguidamente, hicieron el recorrido que denunciaron las adolescentes y verificaron las imágenes del circuito cerrado constatando que las mismas jamás pasaron por el lugar.

Es así que, la policía descartó que haya sido un rapto y que habían simulado el hecho para salir a recorrer y “visitar” a una amiga.

La denuncia falsa había sido con el fin de evitar ser recriminadas por sus familiares.