La fiscal Sonia Benítez encabeza un allanamiento en la sede regional de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) en Salto del Guairá, Canindeyú, en el marco de la investigación sobre el robo de 700 kilos de marihuana. La desaparición de la droga fue descubierta durante un procedimiento de incineración de 14.290 kilos de la hierba, cuando se constató el faltante del cargamento. 

El decomiso de la droga ocurrió en un operativo contra la estructura criminal liderada por Felipe Santiago Acosta, alias “Macho”. La incautación se realizó el 23 de febrero pasado en la ribera del río Piratiy, cuando un convoy de nueve camionetas y tres lanchas fue interceptado por agentes del Grupo de Investigaciones Sensibles (GISE) de la Senad, en coordinación con la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) y el Comando de Operaciones de Defensa Interna (CODI).

Durante el procedimiento, los sospechosos, un grupo de entre 30 y 40 hombres armados, intentaron huir ingresando a un camino rural. Algunos se lanzaron al río, mientras que otros lograron escapar en medio del monte, dejando atrás los vehículos acondicionados para el transporte de grandes cantidades de droga.

El Ministerio Público abrió una investigación penal contra personas innominadas para determinar cómo se sustrajo la droga y a quién fue entregada. Se estima que el cargamento desaparecido tiene un valor de USD 2 millones en el mercado negro brasileño.