Albondiguitas, pechugas de pollo y lomitos, en reuniones de la Policía
Mientras la ciudadanía se queja de una ola de delincuencia que se incrementa con cada día que pasa, en la Policía Nacional están más preocupados por qué van a comer en sus reuniones. Recientemente la Comandancia adjudicó G. 554 millones en servicio de catering para que puedan degustar finos platillos y bocaditos.
El bufé que solicitaron incluye albondiguitas, choricitos al vino, pecetos, strogonoff de carne o pollo con arroz y papa a la crema. Asimismo, pidieron pollo, tartas, pastas, lomito con salsa campignon, cerdo al horno con arroz al curry y festival de pastas que contiene ravioles, lasaña, ñoquis con salsa roja, canelones y fideo spaghetti.
En una nota enviada al titular de la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas (DNCP), Pablo Seitz, la Policía Nacional argumentó que esta licitación se hizo con el objetivo de cubrir los gastos ceremoniales y protocolares de los diversos actos realizados en la Comandancia de la Policía Nacional y otras dependencias, en los que estén presentes el presidente y vicepresidente de la República, ministros y otras autoridades nacionales e internacionales.
La ganadora del millonario llamado de G. 554 millones fue la empresa Emprendimientos Comerciales, de Ana Elizabeth Fernández Espínola. En este sentido hay que recordar que en diciembre del año pasado, la Policía Nacional había adjudicado a la misma empresa de Ana Fernández G. 65 millones en el marco de un llamado para “Adquisición de servicios gastronómicos”. Este contrato sigue vigente hasta diciembre.
Además del mencionado bufé, el llamado también incluye provisión de bocaditos dulces y salados, entre los que se encuentran empanadas de carne y pollo, tartitas de pollo, alfajor, pastafrola, piononos, bolitas de coco rallado con leche condensada. Conjuntamente, los oficiales exigieron tortas, chipita, cocido y café, jamón glasé, lengua a la vinagreta y variedad de ensaladas.
El llamado que está dividido en cuatro lotes también incluye la organización y gestión de eventos que tiene un presupuesto máximo de G. 280 millones. Dentro de este paquete se encuentra también los servicios de mozo y se pide provisión de tarima y de alfombrado para piso de color rojo.
El diario La Nación intentó tener la respuesta oficial por parte del comandante de la Policía, José Arias, pero a través del comisario Víctor Balbuena, subcomandante de la Policía Nacional, se informó que el titular no estaba disponible. En este sentido, hay que recordar que fue precisamente Balbuena el que reconoció a este medio que existe poca respuesta de los policías debido a la pandemia por COVID-19, además de las averías de las cámaras de vigilancia y motocicletas dañadas.
“Son hechos violentos mediatizados y eso genera en la población una sensación de inseguridad. Tenemos menor caso de hechos punibles violentos en comparación a años anteriores”, había explicado Balbuena en esa ocasión. El jefe policial considera necesario el apoyo de tecnologías, pero reconoció que el 40% de las cámaras de videovigilancia en las calles no está funcionando. “No todas las cámaras del 911 están funcionando, del 100% de las cámaras, el 40% no está en funcionamiento porque están con desperfectos a falta de mantenimiento”, manifestó.
