El abogado y doctor en criminología Juan Martens habló sobre el crimen del exdiputado suplente Carlos Rubén Sánchez, alias “Chicharõ”, en la mañana del sábado último.

La muerte de Carlos Sánchez estaba anunciada. A inicios de 2019, él tuvo un problema con el clan con el que se estaba manejando, negociando, mercaderías iban y venían de Bolivia y se produjo un pago con dólares falsos, a consecuencia de ese pago, dos primos desaparecen en Bolivia, hasta hoy día, de hecho”, comenzó explicando en conversación con Telefuturo.

Se pidió USD 200.000 para solamente decir donde está el cuerpo y ese hecho hizo que se rompa la alianza que él tenía con el grupo con el que estaba trabajando en esa zona de Capitán Bado”, continuó.

“Atentaron contra él (Sánchez) en diciembre, pero previamente también las versiones de esa zona del país indican que la gente vinculada a Chicharõ fue precisamente también la responsable de la muerte de los otros dos hermanos de aquel piloto que fue a Bolivia y nunca regresó, se adelantó decían”, apuntó. Aquellos crímenes se dieron en noviembre de 2019 para evitar que esos mismos hermanos acaben con Sánchez, según el estudioso.

De igual manera, el hombre sufrió un atentado, del cual logró salir con vida en diciembre de 2019, rememoró.

“Pero la muerte ya estaba decidida”, dijo, para luego dejar en claro: “Es una venganza vinculada a ese engaño de haber pagado con dólares falsos”.

Agregó también que toda esa zona fronteriza es controlada por el Primer Comando Capital (PCC) y que nada ocurre sin el consentimiento del grupo criminal del Brasil.