Un joven cobrador gastó la recaudación de la empresa donde trabaja en una fiesta y denunció haber sido asaltado. Cayó en contradicciones y la Policía lo detuvo.

Raúl Casco Marín, un joven de 20 años que se desempeña como cobrador de una empresa de recolección de basura, fue detenido tras intentar denunciar el supuesto asalto y robo de G. 2 millones que tenía en su poder.

El joven se acercó a la Comisaría 20 Central a denunciar el hecho y los policías del lugar acudieron a la zona donde supuestamente ocurrió el hecho para verificar si habían cámaras de seguridad, momento en el que el joven, nervioso, comienza a caer en contradicciones, según refieren los intervinientes. Por ese motivo, los agentes lo demoraron y se comunicaron con la empresa, donde se manifestó que, en realidad, el joven no se presentó a trabajar y tenía en su poder el dinero.

Acorralado, Casco confesó que gastó más de G. 800.000 de la recaudación en una fiesta en Villeta y llamó a su madre para que le traiga el resto del dinero, que estaba guardado en su billetera junto con otros objetos de la empresa.