No tiene nombre lo denunciado por Rossana Villar de 32 años, quien aseguró que dio a luz a su bebé en el piso en uno de los pasillos del Hospital Nacional de Itauguá, porque los “profesionales” no le prestaron atención. El bebé, un varoncito que nació con 3.200 kilos, se encuentra en Terapia Intermedia.
“Ella estuvo internada por varios días acá. Fue dada de alta el martes y volvimos ayer miércoles por los dolores que ella tenía. Estaba de 8 meses de embarazo, pero nos volvieron a enviar a la casa siendo que ella ya empezaba a tener contracciones. Es su cuarto hijo y todos nacieron a los 8 meses”, contó a Crónica doña Pablina Cañete, mamá de la parturienta.
Muy dolida, la doña dijo que volvieron al hospital a eso de las 5 de la mañana de este jueves debido a que la mujer ya empezaba a despedir un líquido de color marrón, pero no fueron atendidos por los médicos. “Una enfermera me dijo que los doctores estaban en cirugía y que tenía que esperar. Varias veces fui a insistirles, pero nadie vino a verla. Estábamos en el pasillo y mi hija ya no soportaba los dolores, no es justo que le hagan eso a un ser humano”, mencionó la doña.
Relató que, en momento, su hija le dijo que su bebé ya estaba saliendo y que ella empezó a pedir socorro y que aún así nadie fue a auxiliarla.
“Como nadie nos ayudó le dije a mi hija que se acueste en el suelo. Cuando le saqué el short que tenía el bebé ya se cayó al suelo. Estuvo allí unos cinco minutos. Ni mis gritos de desesperación hicieron que los médicos vengan a ayudarnos. Los pacientes que estaban ahí nos ayudaron y cuando se dieron cuenta que una señora estaba filmando todo, recién ahí se acercaron”, denunció.
“Como un animal mi hija tuvo a su bebé en el suelo. Es triste lo que nos pasó y no somos los únicos porque muchas mujeres ya pasaron por lo mismo. Gracias a Dios el bebé está vivo. Solo quiero que se haga justicia, que no le vuelva a pasarle a otras mujeres. Nadie se merece ser tratados así, es una vergüenza el trato que recibimos en los hospitales públicos. No les importan los pacientes. No tiene nombre lo que hicieron con mi hija y su bebé”, lamentó la mujer.
Todo lo ocurrido fue grabado con un celular por una paciente, pero las imágenes son de contenido muy fuerte por lo que no pueden ser expuestas.