Debido al cuadro de estrés postraumático sufrido por la víctima, un hombre fue condenado por violencia familiar en modalidad de violencia psíquica, según dictaminó el tribunal de sentencia.

A 5 años de cárcel fue condenado el ciudadano chileno Mauricio Igor Díaz por violencia
psicológica. Los hechos indican que su expareja, la víctima, sufrió insultos, amenazas,
hostigamiento y acoso durante 10 meses. Esto produjo en la víctima un cuadro de estrés
postraumático, con reposo psiquiátrico de 15 días y tratamiento de 5 medicamentos por día,
acompañados de más de 20 sesiones de psicoterapia.

La violencia psíquica fue demostrada con diagnóstico psiquiátrico, informes de contenido
biopsicosocial elaborado por un equipo interdisciplinario, capturas de pantalla, extracción de
datos del celular de la víctima y los testimonios.

El Tribunal de Sentencia presidido por el Manuel Aguirre, y como miembros Rossana Maldonado
y Yolanda Portillo, por unanimidad declararon probado en juicio la violencia familiar en su
modalidad de violencia psíquica.
Es la primera vez que un Tribunal de Sentencia impone una condena elevada por la modalidad
de violencia psíquica, reafirmando que su integridad es tan importante como la integridad
física, ambos bienes jurídicos protegidos por la Constitución de la República.