Inicialmente, el sacerdote se encontraba en el hospital de Limpio pero esta madrugada lo derivaron al centro privado para someterlo a estudios. Según la abogada Antonia Sánchez, el cura presenta un cuadro de hipertensión no controlado y requiere un tratamiento más complejo. Sánchez indicó no estar de acuerdo que su defendido sea trasladado a prisión.

Una joven de la Pastoral Juvenil de Limpio denunció que Silvestre Olmedo la manoseó en la espalda y el pecho, incluso intentó besarla. El caso data de setiembre del año pasado y el padre fue imputado por coacción sexual. Ayer la jueza Elsa Idoyaga dispuso que Olmedo cumpla arresto en Tacumbú, pero debido a la superpoblación en la cárcel será llevado hasta Emboscada.