Gustavo Jara (31) contó que estaba en compañía de su novia Marlene Mena en horas de la noche del domingo. Ambos se encontraban en el interior de la casa,ubicada en Yataity Corá 511 del barrio Pinozá de Asunción cuando se percataron de que había ingresado un ladrón, Jara al percatarse forcejeó con el mismo y tras unos minutos la pareja consiguió salir al patio de la casa, desde donde llamaron al sistema 911. Tiempo después, llegaron hasta el lugar dos patrulleras de la comisaría 7ª Metropolitana.

Los agentes recomendaron a Jara y su novia quedarse afuera mientras ellos inspeccionaban la casa. Luego de algunos minutos, les dijeron que podían ingresar nuevamente, pero una vez dentro de la casa se dieron cuenta de la falta de una caja con joyas valuadas en alrededor de G. 2.000.000 y de dos celulares: un Samsung Core y otro A6.

Ante lo courrido llamó a la empresa con la que había asegurado los celulares para que pudieran ubicar los aparatos utilizando el sistema GPS. Grande fue su sorpresa cuando le dijeron que los mismos aparecían en la zona de Eusebio Ayala y Morquio, dirección de la comisaría a la que había pedido ayuda.

Jara pidió explicaciones a los agentes y estos negaron tener en su poder los teléfonos. Los suboficiales Diego Rivarola, Ignacio Ayala, Juan Cardozo y Jorge Benítez habían sido quienes acudieron al domicilio ante la llamada de auxilio.

El hombre señaló que los celulares se encontraban en un dormitorio al cual no había ingresado el ladrón y que no tenía sentido alguno que los policías revisaran la mochila en la cual se encontraba uno de los dispositivos electrónicos.

Poco después de que el incidente fuera denunciado en la guardia de la señalada comisaría y ante los medios de prensa, la pareja regresó a la casa y encontró ambos celulares en el cantero de un árbol ubicado en la vereda de la residencia.