El diputado colorado Benjamín Cantero intentó justificar el nombramiento de su esposa como asesora suya y hasta dijo que los G. 45 millones que ganan entre ambos «es poco» para el «trabajo» que hacen.

En contacto con NPY y Monumental 1080 AM, el diputado colorado Benjamín Cantero dijo que no hay nepotismo en la contratación de su esposa como asesora suya usando el ya acostumbrado argumento esgrimido por sus colegas de que «no es administrador de gastos».

Consultado sobre su salario y el de su esposa, que suman más de G. 45 millones, dijo que es «poco» con relación a la forma en que se mueven, es decir, viajes a Canindeyú y «bolsas de pollo» y medicamentos para la gente necesitada.

«En combustible gastamos G. 9 millones, antes teníamos esto (cupo). No tenemos seguro médico, en eso se va G. 1 millón, tenemos que vestirnos también, se va otro G. 1 millón. En comida es G. 100 mil por día, acá no tenemos ni chipita», dijo al tiempo de insistir que es «caro ser diputado».

Preciso que su cónyuge es nombrada pese a que tiene «cargo de confianza», lo que significa que luego de que Cantero termine su ciclo como diputado, su esposa continuará como funcionaria. No obstante, dijo que si no la siguen necesitando después, saldría de la Cámara Baja y que para ellos «no es la muerte».

Agregó que su mujer «se merece» el cargo que ocupa porque «estuvo en su campaña» y negó que haya un «problema ético y moral» en el asunto como lo insinuó el presidente Santiago Peña.