Una madre desesperada se metió a un refugio de adictos en busca de su hija menor de edad, quien también es usuaria de estupefacientes desde hace varios años. La mujer expuso la situación del lugar, la venta de drogas en las inmediaciones y el aumento de casos.La mujer ingresó a zonas consideradas peligrosas o rojas de la ciudad de Caaguazú para encontrar a su hija menor de edad, quien es adicta a las drogas y se encuentra desaparecida.

La mujer expuso mediante un video uno de los refugios de adictos, donde anteriormente funcionaba el Colegio Latinoamericano de Caaguazú y ahora sirve de aguantadero.“A tres casas se vende la droga, la policía y autoridades saben todo pero no hacen nada y cada día hay más adictos”, denunció la mujer.

Durante el recorrido, la mujer encontró a varios adictos durmiendo sobre colchones, incluso a la intemperie bajo un árbol.