CAAPUCÚ. Un hombre que cuenta con un establecimiento ganadero en la compañía Mboicuatia, de este distrito, falleció esta mañana al dispararse en el abdomen de manera accidental con su rifle de fabricación casera. El hecho ocurrió a 28 kilómetros del casco urbano, en la zona de los humedales del Lago Ypoá.

El fallecido fue identificado como Silvestre Jorge Servín Servían(50), quien reside en la compañía Valle Apu’a de Quiindy. El hombre estuvo acompañado de un amigo identificado como Marcial Ayala Riveros, con quien desde jóvenes acostumbraban a ir a distraerse con la caza y pesca en el lugar.
La fiscal Teresita Paredes manifestó que al producirse el disparo, Servín Servían pidió a su amigo que busque ayuda y fue a avisar a su primo, Ricardo Eligio Chaparro Riveros, y éste comunicó al Jefe del Puesto Policial de Valle Apu’a, Ángel Casco.

Se realizó el procedimiento con apoyo de los bomberos voluntarios de la Tercera Compañía de Quiindy, agentes policiales de la Comisaría de Caapucú, la Fiscalía y agentes de Criminalística, quienes al llegar al lugar se encontraron que el hombre ya falleció, por lo que fue trasladado al Hospital Distrital de Quiindy.

Según el amigo de la víctima, el disparo fue accidental
De acuerdo a la versión brindada por el amigo del fallecido, ayer ingresaron a los humedales del lago Ypoá en canoa, retornando el día de hoy.
Dijo que cuando estaban a pocos metros de llegar a tierra firme, los camalotes y el terreno fangoso no les permitía avanzar, por lo que Servín Servian le dijo para que bajaran y puedan empujar la canoa. Fue en ese momento que Servín se disparó de manera accidental su rifle de fabricación casera.

La fiscal manifestó que la inspección del cuerpo estuvo a cargo del médico forense del Ministerio Público, Dr. Luis Santiago Ibarrola, quien señaló que se constató una herida de arma de fuego de unos 0,5 de diámetro de fuego en la zona del abdomen.
Una vez que se extrajo la baja del paciente, la entregaron al personal de Criminalística, Subofic. Insp. Arnaldo Brítez, para la diligencia correspondiente.
No se dispuso la detención del acompañante porque la hija del fallecido, Ana Graciela Servín, a quien se le entregó el cuerpo de su padre, comentó que su padre y Ayala son amigos de toda la vida. “Es como si fuese hermanos y no toman bebidas alcohólicas”, indicó.