Ramón Torres Gaona, 35 años, fue asesinado el sábado por dos pistoleros que bajaron de un vehículo y le infligieron un balazo en el pecho. La víctima vivía con sus padres en Yaguaron.

El relevamiento de datos hecho por la policía, con familiares y amigos del mismo, menciona que el hombre no tenía enemigos conocidos y con su trabajo de jornalero, ayudaba a mantener a sus progenitores. No se conoce que haya estado metido en nada raro, manifiestan los investigadores del crimen, ocurrido en el km 63 de la Ruta PY1.

La forma en que ultimaron a Ramón tiene todas las características de un hecho perpetrado por sicarios. Esto se refuerza por el detalle que el vehículo que utilizaron los atacantes, es uno que tiene denuncia de haber sido recientemente robado en la localidad  de Itá, además de otras aristas que hacen presumir de un crimen por encargo.

Una de las líneas de investigación que se sigue respecto al homicidio, es la de posible motivación pasional. Según esta hipótesis, el ultimado habría mantenido relaciones con una mujer, presumiblemente casada, relación descubierta por el  maeido.