Familiares de un niño fallecido denunciaron por mala praxis a profesionales de la Unidad de Salud Familiar (USF) de Capitán Miranda, del Departamento de Itapúa. Autoridades sanitarias argumentan que se siguió el protocolo, pero que igualmente investigarán a fondo el caso.

María Graciela Maidana Figueredo, de 47 años, llevó a su hijo de 7 años por vómitos a la USF de la colonia Federico Chaves de Capitán Miranda. Un enfermero le aplicó un inyectable y horas después el niño falleció.

De acuerdo con los profesionales, murió por un “shock cardiogénico-cardiopatía congénita”.

La madre radicó la denuncia sobre la supuesta negligencia médica en la Comisaría 11ª local.

Acudió a dos hospitales

El niño, con síndrome de Down, ingresó a las 3:30 del domingo a la USF, donde el enfermero lo sentó y luego lo acostó en la camilla para aplicarle un inyectable, bajo la justificación de que el medicamento actuaría más rápido.

Al llegar a su domicilio, Maidana observó que se desarrollaron hematomas en el niño y volvió al centro asistencial, pero el mismo profesional los regresó a la casa con la prescripción de beber agua.

Ya alrededor de las 06:30, desesperada por la situación, la madre decidió llevar a su hijo al Instituto de Previsión Social (IPS) de Encarnación, donde el pequeño llegó en estado crítico y, aunque le realizaron la reanimación, lamentablemente se produjo su deceso.

La madre asegura que hubo mala praxis en la USF a la que acudió y que la aplicación del inyectable causó la muerte de su hijo. Maidana afirma además que el enfermero no examinó adecuadamente a su hijo.

Denuncia es investigada

Por su parte, las autoridades sanitarias están investigando el caso a fin de poder determinar lo sucedido, dijo el doctor Juan María Martínez, director de la VII Región Sanitaria.

“Fue evaluado y medicado de acuerdo con el protocolo establecido. Todo lo actuado está asentado en el acta de procedimiento dentro del esquema de salud. Para nosotros, el fallecimiento del niño está dentro del cuadro de Covid. No obstante, buscaremos llegar al fondo de la cuestión para tranquilidad de la familia”, expresó al respecto el médico.

Asimismo, expresó que en el momento de la segunda consulta, el personal enfermero les indicó a los familiares que el menor requería ser trasladado a un centro de mayor complejidad y que disponían de ambulancia para el traslado.

Sin embargo, los familiares decidieron retirar al menor por su cuenta, declaración que no coincide con el testimonio de la madre.