Una rara proveedora de servicios terceri­zados contrató este año el director de la entidad Binacional Yacyretá, Nica­nor Duarte Frutos. Se libe­raron millonarias órdenes de compras que oscilan unos G. 1.000 millones entre enero y mayo del 2019 a favor de la firma Smar SRL, en la que figura como accionista Der­lis Isidro Segovia Olmedo, un humilde fletero de 29 años de la ciudad de Itá, que ni idea tiene de los alcances de la contraprestación.

El joven dijo no haber reci­bido nunca un solo guaraní. Sin embargo, la firma que figura a su nombre admi­nistra millonarios recursos de Yacyretá para el servi­cio de “pago tercerizado de personal”.

Derlis figura como uno de los principales accionis­tas de esta sociedad. Otro accionista es su tío Julio César Olmedo, también de condición humilde que se dedica al oficio de refrigera­ción. El joven es el que tiene el uso de la firma social, pero mediante un poder le entregó las autorizaciones a “una licenciada”, quien adminis­tra la empresa con las atri­buciones que le otorgó.

El joven que funge de empre­sario en los papeles nos con­firmó que se recibió de inge­niero agrónomo, pero que nunca pudo conseguir tra­bajo en el rubro, por lo que se dedica a llevar mercaderías del Mercado de Abasto para parientes que tienen des­pensa en su zona. Derlis dice estar desempleado, mientras tanto, a través de su empresa paga salario mensualmente a alrededor de 70 funcionarios que ingresaron en carácter tercerizado a Yacyretá.

Smar se encarga del pago de sueldos a funcionarios con­tratados de forma terce­rizada en Yacyretá. Nadie sabe responder quién realiza la selección, la nómina para los desembolsos de salarios ni las condiciones en las que se incorporaron estas per­sonas que son aproximada­mente 70.

Derlis sostuvo que se convir­tió en dueño de Smar SRL, gracias a que su difunto tío Pedro Olmedo González le cedió las acciones de la firma. En los registros de socieda­des aparece que sus acciones fueron adquiridas de José Feliciano Duarte Palacios.

El fallecido Pedro Olmedo era un funcionario público que manejaba empresas que participaban en licitaciones del Estado. “Mi tío Pedro, que falleció, era el socio. Él tenía otro trabajo pues y ahí me dijo que nos iba a dar el poder de él. Dijo que “eso nos va a con­venir alguna vez, así me dijo”.

“Yo siempre creía lo que me decía mi tío. Que era una pequeña empresa que de capital tenía G. 40 millones. A mí me había dicho que era para trabajar con el Estado para proveer sillas y demás cosas, pero nunca me dijeron hasta ahora que va a haber licitación en tal parte ni nada. No sabía que se fueron con Yacyretá, que tienen con­trato ni nada de eso”, mani­festó Derlis.

Remarcó su condición de vida humilde y agregó que “nunca me supuse que iba a estar así con estas perso­nas que están trabajando o haciendo contrataciones con una multinacional”

SUSPENDIERON CONTRATO

El director de Yacyretá, rescindió el con­trato con Smar SRL, empresa que se estrenó como provee­dora de servicios este año en la binacional y que tiene como accionista al humilde fletero que ni se imaginaba el dinero que liberó la actual administración.

Duarte Frutos no da la cara y mediante su jefe financiero Arnaldo Fernández respon­dió que no sabían que el dueño de la contratista es el modesto joven iteño, quien en realidad se dedica a llevar mercaderías desde el Abasto.

Fernández señaló que cono­cían “solo a la representante legal, ella está a disposición como empresa”. A través de un comunicado firmado por los jefes administrativo y financiero de la binacional, explicaron que la representa­ción legal de la firma corres­ponde a Bethshalem Monte­ggia Bogado, contadora de Smar SRL.