Parte de la ampliación presupuestaria de más de G. 5.000 millones para ampliar el platillo volador será para construir 12 oficinas más y climatizar el quincho de oro del Congreso Nacional.Entre las obras que se realizarán en el Congreso Nacional, a través de una ampliación presupuestaria de más G. 5.000 millones para el reacondicionamiento de la sede legislativa, figura la climatización del quincho de oro.

El espacio fue construido durante la era de Jorge Oviedo Matto cuando era titular del Parlamento, en el 2012, y tuvo un costo de G. 140 millones.

Otra parte de los recursos serán destinados para la construcción de 12 oficinas más en la azotea del edificio, para trasladar a varios funcionarios que hoy tienen un lugar improvisado, informó Telefuturo.Al respecto, el senador Eduardo Nakayama consideró que se trata de un “nuevo despropósito y una bofetada al pueblo paraguayo para albergar a más parásitos”.

“Es un despropósito, una vergüenza y una bofetada al pueblo paraguayo que se destinen G. 5.000.000.000 para albergar a más parásitos. Aquí no necesitamos más funcionarios, ni más espacios; necesitamos recortar la planilla de funcionarios en la máxima expresión posible”, sostuvo.

A su criterio, se debe bajar en un 30% la cantidad de funcionarios en el Parlamento.Recordó que el edificio del Congreso paraguayo, denominado “platillo volador”, fue una donación del Gobierno de Taiwán, para hacer una comparación de entre los legislativos de ambas naciones.

El “Yuan Legislativo”, según el senador, funciona “con total austeridad” y en una antigua escuela de niñas de los años 20 o 30; mientras que en Paraguay, “un país pobre”, “tenemos en la bicameral una cantidad excesiva de funcionarios”.

 

“No tiene ningún sentido que sigamos manteniendo a esta claque política, corrupta, que lo único que hace es empobrecer al pueblo paraguayo”, espetó.

Por otra parte, anunció que a principios del próximo año presentará un proyecto de ley para sacar privilegios del funcionariado público, que a los dos años de antigüedad ya obtiene la estabilidad laboral.

 

“Voy a pensar, a inicios del próximo año, un proyecto de ley para eliminar el privilegio que tienen los funcionarios públicos, que a los dos años tienen estabilidad laboral. Pero ¿quién les dijo que son semidioses? ¿Por qué ellos tienen que tener estabilidad laboral a los 2 años y los del sector privado a los 10?”, criticó.