Senadores cartistas y aliados desestiman pérdida de investidura de Hernán Rivas, acusado de título falso, en sesión del Senado.

En una decisión que marcó una intensa jornada política, los senadores pertenecientes al Movimiento Honor Colorado y sus aliados rechazaron de manera contundente el pedido de pérdida de investidura contra el legislador Hernán Rivas, quien había sido acusado de presentar un título de abogado “falso” para acceder a su cargo en el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM).

La sesión ordinaria de la Cámara de Senadores tuvo como punto central el análisis de este caso que había generado gran expectación en la opinión pública. Las senadoras opositoras Kattya González, del Partido Encuentro Nacional (PEN), y Celeste Amarilla, del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA), habían presentado formalmente la acusación y pedido de destitución hace casi dos semanas, argumentando que Rivas había engañado al Congreso Nacional con un título de abogado falso.

Sin embargo, la votación fue reveladora: solo dos senadores respaldaron la pérdida de investidura, mientras que 29 votaron en contra y 12 se abstuvieron. Esta decisión refleja el sólido apoyo que Rivas obtuvo de sus colegas de la bancada cartista y sus aliados.

 

Cabe mencionar que el legislador Rivas había sido citado por la Comisión de Asuntos Constitucionales para defenderse de las acusaciones, pero optó por no presentarse físicamente en la sesión. En su lugar, envió un extenso documento y anexos en los que negó rotundamente haber ejercido influencias indebidas y argumentó que las legisladoras opositoras no presentaron pruebas fehacientes que respaldaran sus acusaciones.

Rivas también alegó que el proyecto de resolución carecía de sustento jurídico y que era un acto de persecución por parte de las senadoras González y Amarilla.

Este caso había sido objeto de debates y controversias en las últimas semanas, ya que las declaraciones y documentos de Rivas presentaban inconsistencias. En consecuencia, el legislador optó por mantener un perfil bajo y evitó hablar con la prensa en todo momento.

La absolución de Hernán Rivas marca un capítulo más en la política nacional, generando opiniones divididas y dejando interrogantes sobre la integridad de las instituciones y la lucha contra la corrupción en el país.