El intendente de Asunción, Óscar “Nenecho” Rodríguez, informó que ordenó que la Policía Municipal de Tránsito deje de hacer los controles de rutina y se centre en dirigir el tránsito en la capital en estas semanas, en que existe mucha congestión en el tráfico. Las multas que se harán serán solo para quienes cometan infracciones en flagrancia. Tampoco se descuidará el alcotest. Además, añadió que despedirá a los planilleros de la institución sin importar cuántos sean y que el sistema de recaudación de impuestos de la empresa panameña TX ya dejó de operar.

Rodríguez dio este lunes por la mañana una conferencia de prensa que se centró en informar sobre la auditoría que inició la Contraloría este lunes a la gestión del exintendente Mario Ferreiro, así como a la Junta Municipal.

Sin embargo, durante la conferencia, el nuevo jefe comunal detalló que la Policía Municipal de Tránsito dejará de hacer los controles de rutina que aumentaron en los últimos tiempos, una medida que la ciudadanía conoce con una carga negativa como “operativo pan dulce”, por las supuestas intenciones de recaudación de este órgano de la Municipalidad.

“Nenecho” informó también que no se dejará de lado los controles de alcoholemia y que seguirán aplicándose las multas para infracciones que se cometan en flagrancia. Sin embargo, sostuvo que dio la orden de que los agentes se centren en dirigir el tránsito, cuya congestión se registra con más frecuencia en estos días festivos antes de la Navidad y el Año Nuevo.

El intendente también dijo que “barrerá” con los planilleros y que echará a los que tenga que echar. Cuando se les consultó cuántos funcionarios serán afectados, respondió que “no tenía ni idea de cuántos son (los planilleros)”.

Otra de las medidas anunciadas por Rodríguez fue que se suspendió la aplicación del sistema de recaudación de impuestos de la empresa panameña TX y se volvió a la que tenía de por sí la Comuna. Esta medida se tomó teniendo en cuenta el inicio del proceso para la rescisión del contrato con la firma extranjera, en que existen “innumerables irregularidades”.

Finalmente, Gladys Fernández, funcionaria de Contraloría, dijo durante la conferencia de prensa que la intervención durará unos 45 días, pero todo depende de la apertura de los funcionarios en cuanto a la accesibilidad de los datos. “Queremos que no haya obstáculos”, concluyó.

Rodríguez asumió el pasado viernes en horas de la noche tras la renuncia del intendente Mario Ferreiro, después de un allanamiento en que fueron imputadas seis personas por una supuesta recaudación paralela dentro de la Comuna.