El terreno ganado por la lava al mar en la isla española de La Palma, el llamado delta lávico (“fajana”), corre el riesgo de derrumbarse si continúa su avance a profundidades mayores en el océano, lo que iría acompañado de la liberación brusca de gases, con explosiones hidromagmáticas y olas.

Desde ayer , las miradas se centran en ver la evolución del delta, dado que ha alcanzado el límite de la plataforma insular y es previsible que continúe su avance, lo que podría conllevar el derrumbe de su frente, según los expertos.

La calidad del aire se mantiene “regular”

Desde hace unos días, la erupción del volcán de Cumbre Vieja, que comenzó el pasado 19 de septiembre, está en una fase estable o “valle”, pues no hay patrones significativos en las deformaciones, las emisiones diarias de dióxido de azufre alcanzan las 4.994 toneladas y la emisión difusa de dióxido de carbono es de 1.668 toneladas diarias, valores parecidos a días anteriores.