Luego de la masacre registrada en el violento motín de reclusos perpetrado en la Penitenciaría Nacional de Tacumbú, una de las más pobladas y con mayor índice de hacinamiento del país, el Ministerio de Justicia dispuso este martes cambios en la dirección del penal.

“En el marco de la política del Ministerio de Justicia (MJ) de implementar cambios y rotaciones regulares de modo de asegurar la aplicación eficiente de sus planes, programas y proyectos, la ministra de Justicia, Cecilia Pérez, dispuso el cambio del director de la Penitenciaría Nacional (Tacumbú)”, señala un informe emitido esta siesta.

A través de la resolución Nº 149, la cartera de Estado designó a Rodolfo Julián Bernadet en reemplazo de Domingo Antonio Amarilla Florentín, quien a su vez fue designado mediante resolución Nº 150 como director de la Granja Penitenciaria Ko’ê Pyahu.

Cabe mencionar que frente a la Granja Ko’ê Pyahu se encontraba como encargado de despacho Nery Alberto Ruiz González, quien pasa a cumplir otras funciones dentro de la Dirección General de Establecimientos Penitenciarios.

Siete muertos tras motín

El pasado martes 16 de febrero, en horas de la tarde, estallaba un motín de reclusos en el penal de Tacumbú y una toma de rehenes de la que fueron víctimas la mayoría de los guardiacárceles del centro reclusorio.

Mientras equipos antimotines del Ministerio de Justicia y de la Policía Nacional trataban de luchar contra el asedio de internos que atacaban con todo tipo de objetos contundentes, más hacia adentro de la penitenciaría se gestaba una masacre. Al final de la jornada e incluso en horas del día siguiente se confirmaron siete internos fallecidos, tres de ellos decapitados.

En las afueras del penal, familiares desesperados por la situación de parientes presos también lucharon contra los uniformados, quienes exigían información y una solución a la problemática por parte del Ministerio de Justicia. Fue así que la ministra Cecilia Pérez ingresó hasta el interior del penal y, en un lapso de 20 minutos, logró negociar con los amotinados y la liberación de los agentes penitenciarios tomados de rehenes.