Los huesos de un policía militar retirado fueron encontrados el domingo pasado en la finca donde vivía, en Pirenópolis (GO), a unos 130 kilómetros de Goiânia, Brasil. Según la Policía Civil, el cuerpo de Clédio Vilela Cardoso, de 53 años, fue devorado por sus seis perros.
Una vecina informó a la policía que vio a Clédio por última vez el 8 de abril. Desde entonces, su ausencia en la región ha preocupado a familiares y amigos, que acudieron a la finca a buscarlo. Al ingresar al lugar encontraron los restos del policía retirado.
La principal línea de investigación de la Policía Civil es que Clédio murió por causas naturales. Sus perros se quedaron sin comida y devoraron el cuerpo pocos días después de la muerte, informa CNN.
“Esto dificultó un poco el examen, ya que los tejidos corporales ya no se podían analizar. Sin embargo, aún fue posible controlar los huesos en busca de traumatismos, fracturas o signos de violencia externa”, informó el delegado Tibério Martins.
Los familiares del policía fueron entrevistados para comprobar si Clédio padecía alguna enfermedad que pudiera haber causado su muerte.
“En la escena del crimen, junto a una mesa, se encontró una libreta con notas, la llave de un auto, un frasco de spray similar a un insecticida y pequeños objetos. Junto a la mesa yacía una silla volcada y en ese lugar estaban los huesos”, añadió el delegado.

La Policía Civil se encuentra a la espera de la realización de los peritajes en el lugar del crimen y en el cadáver para determinar la causa de la muerte. Si se determina que la muerte se debió a causas naturales, el caso se cerrará.