La Policía Nacional encontró en una fosa los cuerpos de Rigoberto Bareiro Vargas y Diego Daniel Osorio, quienes fueron secuestrados la semana pasada en Itapúa. Se presume que se trataría de un ajuste de cuentas de la mafia.

El comisario Nimio Cardozo, jefe antisecuestros de la Policía, confirmó a la radio 780 AM que encontraron en fosas comunes en zona de San Pedro del Paraná los cuerpos sin vida de Rigoberto Bareiro Vargas y Diego Daniel Osorio, quienes fueron secuestrados el 11 de octubre en el departamento de Itapúa.

Bareiro Vargas tenía orden de captura por cuestiones de drogas y el segundo era su secretario, según detalló el uniformado.

La familia del supuesto capo narco negoció con los captores el pago de un rescate de 30.000 dólares, pero nunca se concretó porque los secuestradores cambiaban a cada rato el sitio de entrega.

“No se descarta algún ajuste de cuentas por cuestiones relacionadas a las drogas, al menos es la principal hipótesis”, comentó Cardozo sobre el posible trasfondo de este doble crimen.

 

Este hallazgo se produjo luego de la detención de Fernando Araújo Ibarra de 36 años, de cuyo poder fueron incautados un automóvil y un arma de fuego relacionados al hecho.