La hija del vicepresidente de la República, Pedro Alliana, contratada como asesora en la Cámara de Diputados, no quiso explicar en qué consiste su trabajo ni sobre su carga horaria. Se limitó a decir que se busquen sus datos en acceso a la información pública

Una muy incómoda Montserrat Alliana evitó en todo momento hacer declaraciones sobre su cargo de asesora en la Cámara de Diputados con sueldo de G. 18 millones, limitándose a pedir a la prensa que busquen sus datos en el portal de acceso a la información pública.

Según la hija del vicepresidente de la República, sus declaraciones podrían «malinterpretarse» por lo que prefirió que se indaguen sus datos.

«Para no tener malentendidos ni malinterpretaciones de mis palabras, la verdad me gustaría que puedan traer los datos de ahí», dijo en reiteradas ocasiones.