El propietario de un local nocturno que fue escena de una grosera aglomeración de personas el fin de semana último en la ciudad de Capiatá fue imputado por la Fiscalía.

“Con relación a una fiesta clandestina realizada en Capiatá, la fiscala Carolina Martínez abrió una causa penal de investigación contra el organizador y propietario del local por violación de las medidas sanitarias”, se informó este lunes.

Esta mañana prestó declaración indagatoria el organizador, identificado como Ever Nicolás Garay Ocampos, en la unidad penal. El hombre fue imputado, explicó la agente fiscal, y se encuentra sometido al proceso penal por violación de las medidas de cuarentena sanitaria. Los antecedentes de la causa ya se remitieron al juez penal competente.

Sorprendidos en plena farra

La Policía Nacional procedió en la madrugada del domingo pasado a despejar a un total de 150 personas aglomeradas en un local nocturno en la ciudad de Capiatá. En las inmediaciones se realizaban, además, carreras ilegales de motocicletas y automóviles.

El hecho ocurrió a las 3:03 en la madrugada del domingo, en un local nocturno denominado El Escobero, ubicado en el kilómetro 21 de la Ruta PY02 Mariscal José Félix Estigarribia, de la ciudad de Capiatá.

Agentes policiales de la comisaría 59 Toledo Cañada acudieron hasta el lugar respondiendo a una llamada telefónica que denunciaba la realización de una supuesta fiesta clandestina en plena vigencia de las medidas sanitarias emanadas por el Gobierno para intentar frenar los contagios del COVID-19.

Los uniformados irrumpieron en el lugar y sorprendieron a la multitud hacinada en el lugar, consumiendo bebidas alcohólicas, sin tapabocas y escuchando música a un alto volumen.

Los presentes, al percatarse de la presencia de los agentes de seguridad, procedieron a abandonar raudamente el predio. De las inmediaciones también fueron despejadas un total de 30 motocicletas y 10 vehículos, que participaban igualmente de carreras ilegales en medio de la ruta.