Paraguay apunta a convertirse en un gran centro de minería de criptomonedas

La fiebre minera de la criptomoneda crece a pasos agigantados en Paraguay. Los conocidos como criptomineros se instalan en nuestro país ante el flujo de electricidad más barato que obtienen aquí y los tecnicismos legales. Mientras esto ocurre de manera acelerada, el Gobierno no regula esta actividad comercial que puede ocasionar serios problemas en la red de suministro de energía y servir como lavado de dinero.

Si bien su concepto ya se instauró en la sociedad, alrededor de la criptomoneda surgen varios tópicos más de los cuales existe abundante desconocimiento, tal como la minería.
Una criptomoneda es un sistema de pago digital que no depende de bancos para verificar transacciones. En lugar de dinero físico, los pagos de criptomoneda existen únicamente en forma de entradas digitales dirigidas a una base de datos en línea en la que se describen transacciones específicas.

Las criptomonedas operan en un libro mayor público distribuido llamado cadena de bloques, un registro de todas las transacciones que tienen y actualizan los propietarios de monedas. A diferencia del dinero respaldado por gobiernos, el valor de las monedas virtuales está totalmente impulsado por la oferta y la demanda. Esto puede provocar cambios brutales que pueden dar lugar a muchas ganancias para los inversionistas o a grandes pérdidas.

Existen varios tipos, siendo los más reconocidos: Bitcoin, Ethereum, Litecoin y Ripple.
Estas unidades de criptomoneda se crean mediante un proceso llamado minado, el cual implica utilizar potencia informática para resolver problemas matemáticos complicados que generan monedas. Los usuarios también pueden comprar las divisas desde agentes, para luego almacenarlas y gastarlas mediante monederos criptográficos.

La minería de criptomonedas actualmente se encuentra en auge en varios países del mundo, siendo uno de ellos Paraguay. A diferencia de las empresas industriales que tardan años en construir nuevas instalaciones, los servidores de criptomonedas pueden estar funcionando en un par de meses si cuentan con el equipo y la ubicación ideal. En nuestro país los puntos predilectos son Ciudad del Este, Mariano Roque Alonso y Villarrica.

Aquí los mineros de criptomonedas se están organizando rápidamente y realizan importantes eventos que convocan a muchos interesados en incursionar en el novedoso rubro que encontró en nuestro país energía barata, lo cual es indispensable ya que los ordenadores que se encargan de minar las criptomonedas consumen una cantidad considerable de electricidad.

Específicamente en Villarrica, los mineros consiguen a precios extremadamente bajos, mediante la tarifa subsidiada que obtiene la empresa Clyfsa, la cual ganó una batalla legal a la ANDE. Como resultado, Clyfsa aún compra electricidad a ANDE a una tarifa antigua, que le permite ofrecer un “precio especial”, desde $16 dólares por megavatios-hora, a los mineros locales.

En cuanto a este punto, en una crítica que se elevó al Congreso en enero pasado sobre la tasa muy “preferencial” que pagan mineros en Paraguay, se menciona que la tarifa subsidiada que obtiene Clyfsa de la ANDE ronda los 6,5 millones de dólares al año y que con la instalación de más criptominerías en Villarrica, mayor será el subsidio que deberá afrontar la ANDE y el Estado Paraguayo, y por consiguiente todos los contribuyentes.

“Esta masiva instalación de criptomineras en Villarrica, aprovechándose del ilegal subsidio que impone Clyfsa, tendrá a crecer rápidamente, incrementando la sangría a las arcas públicas, lo que se debe parar inmediatamente, antes que sea demasiado tarde”, refiere el documento.

De esta manera, los miembros de la “Campaña Itaipú 2023: Causa Nacional” solicitaron a la Comisión Permanente del Senado eliminar los subsidios de costo de energía a Clyfsa, ante el riesgo de una estafa de criptominería y del hidrógeno “verde” por parte de otras empresas privadas.

FALTA REGULACIÓN

Al ser un novedoso comercio que está atrayendo a miles, es imperioso regularlo. En ese sentido, por ejemplo, en Texas (EEUU) los criptomineros necesitarán autorización para obtener energía, de modo a que la red eléctrica esté protegida y no se vea saturada ante el excesivo consumo.

En el ámbito legislativo paraguayo se encuentra un proyecto de Ley que regula la Industria y Comercialización de Activos Virtuales –Criptoactivos, dando participación como órgano de autoridad el Ministerio de Industria y Comercio, que a su vez coordinará a la Comisión Nacional de Valores (para la regulación de la oferta pública), la Seprelad (para el control del lavado de dinero), la ANDE (para satisfacer las necesidades de energía) y el Ministerio de Hacienda (para cobrar los impuestos).

En los alcances de la normativa, que ya tiene media sanción del Senado y se encuentra en estudio en Diputados, se establece que la ANDE otorgará el carácter de consumidor industrial a los mineros y fijará el monto que deberán pagar los mismos, quienes a su vez deberán estar debidamente habilitados para operar.

UN NEGOCIO NO INDUSTRIAL

En la práctica, la minería de criptomonedas es un negocio comercial y no así uno industrial. Los emprendedores locales solo requieren de un capital para instalar los ordenadores en conteiners refrigerados y contratar a alguien que supervise que todo funcione a la perfección. No genera así mano de obra ni modificación de la materia prima.

Por ejemplo, en una de las mayores granjas de minería en China, perteneciente a Bitmain, con unos 20.000 rigs de minería, solamente trabajan 12 empleados.

La hidrológica canadiense Hydro Québec suministra electricidad a las minerías de la zona y una de ellas publica sus cifras -por ser una empresa listada en una bolsa pública-, incluyendo el costo que paga por la energía en Paraguay: unos 3,6 centavos por KW, por el plazo de cinco años.

La velocidad con que se arman estas minas en nuestro país, atraídas por la alta rentabilidad ante el precio muy accesible de la electricidad, plantea un reto para la red eléctrica y los organismos de control, por lo cual es urgente establecer medidas claras ante esta “fiebre minera” para su correcto funcionamiento.