El ministro de Educación y Ciencias (MEC), Eduardo Petta, realizó un posteo sobre un menor de 11 años que se dedica a lustrar botas. Días después, las críticas de los internautas siguen lloviendo en la red por “idealizar” el trabajo infantil.

“Vino elegante y como maletín, el cajón de lustrabotas con el que trabaja todas las mañanas. Josías Jesús tiene 11 años, por las tardes va a la Escuela, donde sueña y se forma para llegar a ser Ministro de Educación. Pidió conocerme y me dejó la certeza de que ese sillón le pertenece”, posteó a través de su cuenta oficial de Twitter, el ministro de Eduardo Petta el pasado 15 de setiembre.

Desde ese momento, las críticas no se hicieron esperar: los internautas criticaron al ministro de Educación por exponer a un menor en sus redes, hablaron de “populismo barato” y lo cuestionaron por romantizar el trabajo infantil.

“Señor le informo que los niños no deberían trabajar. Usted me da vergüenza. Cada mes una nueva boludés. Renuncie ya por favor”, escribe uno de los tuiteros.

“Orgulloso mostrando la precariedad de este país… Este inocente no debería de trabajar.. ¡¡Vos deberías hacerlo para que el deje de sacrificar su infancia para ganar el pan de cada día!! Te sentís muy orgulloso mostrando eso.. ¡Deberías sentir vergüenza!”, afirma textualmente otro perfil.

La mayoría de las personas que respondieron insistieron en que un secretario de Estado debería resaltar que los niños deben dedicarse a estudiar y no a trabajar. Sin embargo, desde el área de prensa del Ministerio de la Niñez y Adolescencia afirmaron que no tienen una postura respecto a esta situación. Por su parte, el exministro de la Niñez, Ricardo González, recordó que Paraguay es suscriptor de la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño.

“En sus protocolos facultativos, uno de ellos se relaciona a la erradicación del trabajo infantil, y estamos comprometidos en ella de manera progresiva. Por ello el Ministerio de Trabajo y el Ministerio de Niñez incorporan programas específicos para ello. El Ministro (Eduardo Petta) debió de considerar esto”, manifestó.

En ese contexto, Sergio Guillén, de la organización Callescuela, sostuvo que con esta publicación Petta da a entender que los niños tienen que estar trabajando para acceder a sus derechos. “Dentro de su función pública y política está haciendo entender que llegar a un fin depende solo del esfuerzo y de la voluntad, cuando en realidad el garante es el Estado”, dijo.

“Vemos que utiliza la figura del niño para decir que depende de la voluntad individual, cuando sabemos que muy pocos niños que trabajan pueden acceder a condiciones mínimas de educación. Pensamos que está idealizando la situación. Sabemos que ahora hay un recorte importante del 4% de presupuesto; la educación paraguaya está en ruinas. Prácticamente dos o tres niños que inician la etapa de formación llegan a terminar la parte secundaria”, agregó.

“A él (niño) como ciudadano, a sus padres se les está negando un trabajo digno, se les debe dar mejores condiciones; hay un índice de informalidad bastante grande”, puntualizó.

Explicó que la realidad hace que muchos niños deban trabajar y, entonces, desde la organización, tratan de enseñarles cuáles son sus derechos y de promover políticas públicas para evitar la explotación. “Tenemos programas de protección para que los niños que tengan la necesidad de trabajar lo hagan en condiciones dignas. Sabemos cuál es la realidad de la gente”, confesó.

No obstante, puso énfasis en que esta realidad es consecuencia de la falta de efectividad de las instituciones estatales, entre ellas, del Ministerio de Educación, que debe fortalecer sus políticas públicas para que todos accedan a la educación a pesar de estar en una situación de pobreza.

“El ministro dijo que si él (niño del video) estudia va a llegar a ser ministro. El ministro plantea de forma idílica; para mí, depende bastante de las políticas públicas, aplicadas a la atención integral para que esto suceda”, subrayó.