Una filmación con celular dejó al desnudo la manera violenta en que la profesora Martina Rivarola de la escuela Cristo Rey, del novel distrito de Nueva Toledo, enseñaba a un alumno de esa institución pública.
Fue la fiscal María Irene Álvarez quien tomó el caso de oficio el viernes por la tarde y llamó a declarar al niño agredido, acompañado de sus padres.
Al escuchar la versión de la presunta víctima, la agente fiscal imputó a Rivarola. La docente tiene vasto antecedente por recurrir a la agresión física como medida de castigo, según alumnos.
Según la representante del Ministerio Público, en los próximos días la docente investigada será llamada para brindar declaración ante la causa donde se la acusa.
MÁS DEL CASO
La práctica de la antigua pedagogía, que sirvió para el aprendizaje de generaciones pasadas de alumnos, fue aplicada por la docente del nivel primario en una escuela pública del distrito de Nueva Toledo, en el departamento de Caaguazú.
La profesional de la educación no encontró mejor manera de concretar la enseñanza que en medio de amenazas a un alumno que «se resistía» a comprender los pasos de un problema de números.
Con la regla de madera en mano y golpes en la cabeza, el menor fue sometido al antiguo método que muchos recordarán haber experimentado con sus profesores o padres.
Rápidamente por las redes sociales se viralizó el material, llegando hasta la Coordinación de Supervisiones del Departamento de Caaguazú, que ya intervino la escuela para tener mayores detalles sobre este irracional y obsoleto método de enseñanza.
Un alumno suyo fue quien decidió grabar el maltrato supuestamente cansado de las reacciones de la docente, según las denuncias del hecho.