“Mi hijo estaba jugando con mis primos. Encima del pozo había algo que ellos querían. Él se fue a buscar eso y se hundió en el pozo con la tabla”, detalló Cáceres. El hecho se registró en el barrio San Pedro de la ciudad de Encarnación, Itapúa.

El padre de profesión panadero contó que fue sobrina quien avisó lo sucedido. Dijo que no dudó en bajar para rescatar al menor. “Directamente me quise tirar, entonces me ataron de la cintura y me lancé. Pero como faltaba mucho aún para llegar hasta el fondo, como 15 metros más o menos, les pedí que me soltaran”, afirmó.

Al caer tomó a su hijo y lo colocó sobre su regazo hasta que llegue el rescate. “Él se atajó por una piedra en el borde, se cayó de pie, la tabla alivianó la caída. No sabía nadar, estaba tranquilo, no lloró en ningún momento, solo me dijo ‘papá bajate, sacame de acá’. Lo único que pensé era rescatar a mi hijo, sacarle de ahí rápido”, indicó a la radio R800 AM.

Agradeció la rapidez con que actuaron los bomberos voluntarios. Debido a la caída se lastimó la espalda (rotura fibrilar) pero su pequeño solo tiene un golpecito en el pie derecho. No obstante, el niño se encuentra internado en estado de observación en el Hospital Regional de Itapúa y hoy podría ser dado de alta.