Un niño de 6 años fue víctima de abuso sexual por parte de su propio padre, que en principio se pensaba era el abuelo. El autor deberá cumplir 4 años y medio de cárcel y el nivel de parentesco se descubrió con una prueba de ADN.

La jueza de sentencia de Asunción, Elsa García, explicó que si bien la pena máxima de la antigua ley para el abuso sexual en niños es de cinco años, el acusado recibió solo 4 años y seis meses porque no contaba con antecedentes penales.

Si hubiera sido condenado con la actual normativa modificada, le habrían aplicado hasta 15 años de pena privativa de libertad.

En principio se manejaba que el autor del abuso era el abuelo de la víctima, sin embargo, sobre la etapa final se descubrió que en realidad se trataba del padre.

“Toda la familia si bien prestó declaración omitió mencionar el hecho, ni la mamá ni la abuela contaron, pero la prueba de ADN lo identificó como el papá del menor”, comentó García en entrevista con la 730 AM.

El sentenciado se encuentra en la Penitenciaría de Tacumbú, donde deberá guardar reclusión, aunque se cree que podría solicitar medidas alternativas.

El hecho se denunció en el 2014, y la fiscal IIrene Alvarez, quien continuó el trabajo de su colega Alicia Sapriza, presentó los elementos para probar que el hombre manoseó varias veces a su hijo.

Según se supo, este niño es producto de un abuso, es decir, el hoy condenado supuestamente violó a su hija, la madre de este menor, cuando ella tenía 15 años.