El ministro de Salud Pública y Bienestar Social, Julio Borba, reveló ayer que en junio vencen las 100.000 dosis de biológicos contra el COVID-19 donadas por India a Paraguay y que están en un depósito de la cartera sanitaria, a la espera de la habilitación para su uso de alguna autoridad regulatoria.

“El vencimiento de las vacunas donadas por India es en junio de este año. Si no hay una autorización de alguna autoridad regulatoria renombrada, no se van a usar las mismas”, refirió en el programa El Péndulo de Unicanal.

Borba refirió también que están “peleando con todos los mecanismos para obtener las vacunas lo antes posible. Hay una guerra entre todos los países para adquirir las vacunas”, remarcó y agregó que tienen cientos de ofertas, pero muchas son muy poco serias.

“La mayoría te pide pagar el 50% a 70% y traerte en 15 días, pero qué garantías tenés”, precisó. En este contexto, señaló que están viendo la factibilidad para traer las vacunas chinas.

Al respecto del mecanismo Covax, en el que Paraguay confío para abastecerse de los biológicos, contó que la directora general de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Carissa Etienne, explicó que las dosis estimadas para marzo no llegaron porque “la capacidad de producción no puede cumplir con su cupo”.

Borba, entonces, preguntó si había alguna penalización por ello, pero no recibió respuestas. Recordemos que, hasta el momento y a pesar de las múltiples promesas de llegada de más dosis, solo se recibieron 36.000 dosis de las 4.300.000 acordadas con el mecanismo.

Marzo, explosión de casos

La curva de nuevos contagios de COVID-19 en nuestro país, que venía sufriendo altas y bajas desde noviembre del año pasado, no ha parado de ir hacia arriba a partir de los primeros días del mes de febrero y sufrió un enorme impulso en el mes de marzo, que cerró con un total de 1.025 fallecidos, un número mayor que la suma de enero y febrero juntos.

Durante el mes de marzo se realizaron un total de 161.158 test de COVID-19, cuyos resultados arrojaron 68.504 nuevos casos de COVID-19, lo que representa un 42,5 por ciento de casos positivos, un valor realmente alarmante, si se considera que en el mes de enero pasado los casos positivos representaban el 27 por ciento del total de los análisis realizados.

Para Borba, esto se debe al descontrol de la ciudadanía en los sectores denominados informales. Por ejemplo, “en los piqui vóley, las reuniones de asado con los muchachos, las fiestas clandestinas y más. Mirando la calle ahora, parece que no hay restricciones. Es preocupante”, enfatizó el ministro de Salud Pública.