El juez Gustavo Amarilla declaró la rebeldía y ordenó la captura de los integrantes de la banda criminal autodenominada EPP, sindicados como los secuestradores del ex vicepresidente de la República Óscar Denis. Estos ya fueron imputados por terrorismo y asociación terrorista, secuestro, privación de libertad, extorsión y extorsión agravada.

Esteban Marín López, Luciano Argüello y Rubén López, los tres adultos del EPP sindicados como los autores del
secuestro de Óscar Denis, fueron declarados en rebeldía, por lo que el juzgado ordenó su captura, según informaron desde el Poder Judicial.
Los tres hombres junto con tres adolescentes -también miembros de la agrupación delictiva- fueron identificados por los investigadores como quienes el pasado 9 de setiembre capturaron al ex vicepresidente Amancio Óscar Denis Sánchez (74) y al peón indígena Adelio Mendoza Benítez.

El pasado 17 de octubre, el juez Amarilla admitió la imputación y procesó a Marín, Argüello y López y los convocó a una audiencia de imposición de medidas que tenía que realizarse en la fecha.
Los fiscales que llevan la causa son Federico Delfino, Lorenzo Lezcano, Marcelo Pecci y Alicia Sapriza. Estos formularon imputación contra los tres hombres por los hechos punibles de terrorismo y asociación terrorista, secuestro, privación de libertad, extorsión y extorsión agravada.
Denis fue secuestrado por los criminales del EPP en la estancia La Tranquerita, una semana después de que efectivos del Comando de Defensa Interna (CODI) localizarán un campamento de la agrupación y se produjera un enfrentamiento entre estos y los delincuentes. Como resultado, dos menores de edad – supuestamente hijas de miembros de la organización criminal- fallecieron baleadas.

Para poner en libertad al secuestrado, el EPP puso varias condiciones, entre ellas la donación de alimentos a comunidades indígenas por una alta suma de dinero, además de la liberación de dos de sus miembros, Carmen Villalba y Alcides Oviedo, quienes cumplen condenas por el secuestro de María Edith Bordón de Debernardi.
Los familiares de Denis claman a los captores una prueba de vida del ex vicepresidente, así como un canal de comunicación para entablar negociaciones a fin de que pueda ser liberado con vida.