La ciudad de Foz de Iguazú tendrá un toque de queda durante 15 días a raíz del incremento de casos de COVID-19 en el estado de Paraná. La medida podría repercutir en la vecina Ciudad del Este, donde existen algunos compatriotas que cruzan la frontera para hacer compras.

Debido al considerable aumento de casos de coronavirus en el estado brasileño de Paraná, el gobernador Carlos Massa Ratinho Junior decretó un toque de queda general a partir del 1 de diciembre.

La medida rige para los 299 municipios que forman parte del citado estado brasileño, incluyendo a la ciudad de Foz de Iguazú, colindante a Ciudad del Este.

En este caso, la Prefectura de dicha localidad fronteriza se vio obligada a ceder al Decreto 6.284/2020 del Gobierno de Paraná, aplicando así el toque de queda para sus habitantes.

La disposición contempla una restricción de circulación de personas entre las 23:00 y las 5:00 horas. Aquellos que se encuentren en la vía pública fuera de dicho horario serán demorados por los efectivos policiales, pudiendo ser procesados por desacato.

En principio, el toque de queda se extenderá por un plazo de 15 días y tiene por objetivo frenar el contagio del COVID-19 tanto en Foz de Iguazú como en los demás municipios del estado de Paraná.

La citada disposición podría tener consecuencias en Paraguay, esto considerando que varios compatriotas acostumbran a cruzar la frontera para realizar algunas compras en el lado brasileño o viceversa.

El más reciente parte epidemiológico señala que en Foz de Iguazú se registraron 176 nuevos casos de COVID-19 y 5 decesos. Con ello, el municipio llegó a las 200 muertes y 14.285 contagiados.