En medio de mucho dolor familiares y amigos dieron el ultimo adiós a Alecio Dresch de 73 años y a su nieto Leonardo Farías Dresch de 12 años, ambos secuestrados y asesinados a golpes y a puñaladas el año pasado.

Los féretros llegaron hasta la colonia Margarita, Nueva Toledo, alrededor de las 8:30. Primero fueron llevados a la capilla de la comunidad, donde se llevó a cabo una ceremonia religiosa antes del sepelio.

El sacerdote de la colonia, Mario Ozorio, lamentó que un ser humano pueda cometer actos atroces por la codicia, dinero y poder. Pidió a los familiares perdonar ante Dios a los autores del crimen y rezar por ellos.

Una de las hijas de Alecio Dresch recordó la intachable vida de su padre, a quien calificó de una persona con grandes valores. De la misma forma, indicó que Leonardo siempre fue un niño alegre, con hermosa sonrisa y con grandes ideales.

Los restos de los Dresch fueron llevados al camposanto local para una digna sepultura.