Una enfermera de Nueva York se convirtió este lunes en la primera estadounidense en ser vacunada contra el covid-19 en el arranque de una campaña a la que se aferra con esperanza el país que ya ha superado los 300.000 muertos por la pandemia.

Sandra Lindsay, una sanitaria especializada en cuidados intensivos, recibió la vacuna frente a las cámaras en el Hospital Judío de Long Island, un gran centro situado en el barrio de Queens.

“La primera vacuna fue administrada. ¡Felicitaciones Estados Unidos! Felicidades a todo el MUNDO!”, celebró poco después en Twitter el presidente saliente de Estados Unidos, el republicano Donald Trump.

Poco después, el presidente electo Joe Biden, que asumirá el cargo el 20 de enero, tuiteó: “Mantengamos la esperanza, llegan días mejores”.

El inicio de la vacunación llega seis días más tarde que en Reino Unido, primer país que autorizó el inmunizante de los laboratorios Pfizer/BioNTech.

Tras la inyección, la enfermera afirmó sonriente que se encontraba “bien” y “aliviada”, con una sensación muy similar a la de cualquier otro pinchazo.

La campaña de vacunación en Estados Unidos, que debe priorizar en primer término a los trabajadores sanitarios y las residencias de ancianos, arranca en momentos en que la pandemia golpea con fuerza al país, que el lunes superó los 300.000 muertos, con más de 16 millones de casos.

El objetivo de Estados Unidos es vacunar a unos 20 millones de personas antes que termine diciembre, y a 100 millones antes de que acabe marzo.

“Es la luz al final del túnel, pero es un túnel largo”, advirtió el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, recordando que se necesitarán “meses” antes de que una masa crítica de la población esté inmunizada.

El inmunólogo Anthony Fauci advirtió que pese a la vacunación hay que que seguir usando barbijo y respetar la distancia física durante los próximos meses.

Si “convencemos a la gente que se vacune (…) y obtenemos (inmunidad colectiva) al final de la primavera (boreal), principios del verano, entonces en otoño podemos tener un cierto grado de alivio (…) y alguna forma de normalidad “, dijo en MSNBC.