Tras su paso por Tailandia, el papa Francisco prometió ayer, tras su llegada a Japón, que enviará hoy un mensaje fuerte a favor de la eliminación de las armas nucleares a las ciudades mártires de Nagasaki e Hiroshima.Tras aterrizar en Japón, en el marco de su gira asiática, el pontífice se refirió al “trágico episodio de la historia humana” que puso fin a la Segunda Guerra Mundial y en el cual murieron 74 mil personas en Nagasaki y 140 mil en Hiroshima, por dos bombas atómicas lanzadas por EEUU.

“Pronto visitaré Nagasaki e Hiroshima donde rezaré por las víctimas del bombardeo catastrófico y me haré eco de sus propios llamados proféticos al desarme nuclear”, dijo Francisco, de 82 años, a los obispos, en una ceremonia de bienvenida en la nunciatura apostólica de Tokio.

El Papa afirmó también que con este visita cumplía un deseo de larga data de predicar en Japón. “No sé si sabrán, pero desde joven sentía simpatía y cariño por estas tierras. Pasaron muchos años de aquel impulso misionero cuya realización se hizo esperar”, señaló Francisco, quien es el primer Papa en visitar Japón desde el viaje de Juan Pablo II en 1981. Apenas 440 mil, de los 126 millones de japoneses, son católicos.

“Sabemos que la Iglesia en Japón es pequeña y los católicos son minoría. Esto no debe restar valor a su compromiso con una evangelización”, recordó a los obispos.