Ciudadanos autoconvocados de la ciudad de Ñemby escracharon el miércoles a la fiscala general del Estado, Sandra Quiñónez, por la denuncia que duerme en el Ministerio Público contra el intendente de Ñemby, Lucas Lanzoni, hijo del senador liberal Blas Lanzoni.

Los manifestantes llegaron hasta el domicilio de la fiscala general del Estado, Sandra Quiñónez, para denunciar que hasta el momento la agente Lilian Alcaráz no realizó ninguna diligencia en cuanto a la denuncia presentada por supuesto enriquecimiento ilícito, lavado de dinero y estafa contra el intendente de Ñemby, Lucas Lanzoni.

Uno de los ciudadanos autoconvocados sostuvo que la denuncia, presentada hace dos meses, se basa en un supuesto robo de casi G. 6.0000 millones y que no se está investigando, a la vez de exigir que el municipio sea allanado.

Asimismo, refirió que la ciudadanía cree que hay un encubrimiento por parte de la fiscala general del Estado a favor del clan Lanzoni, que pertenece al movimiento liberal llanista en el Senado y que eventualmente la podrían salvar de un juicio político.

Además, contó que un manifestante fue atacado con bombas molotov luego de realizar denuncias y filtrar audios sobre la familia Lanzoni.

De la misma manera, responsabilizó al clan Lanzoni y a la fiscala general del Estado en caso de que alguno de los manifestantes se vea afectado en su integridad física.

Esto, luego del enfrentamiento que ya se había registrado en la ciudad de Ñemby semanas atrás, cuando los vehículos de los manifestantes fueron dañados por supuestos simpatizantes del intendente liberal.

La fiscala general, a través de un vocero, pidió a los manifestantes que suspendan el escrache y les invitó a su despacho para las 10.00 de este jueves, según informaron.

Los ciudadanos se manifestaron primeramente frente a la Municipalidad de Ñemby, alrededor de las 17.00, y posteriormente se dirigieron hasta la casa de la titular del Ministerio Público, ubicada en la ciudad de Lambaré.