Contrariamente a su actitud de días pasa­dos, en los que el presidente Jair Bolsonaro se mostraba renuente a dar importancia a la pandemia de coronavirus, participando en manifestaciones con sus parti­darios y hasta organizando un cumpleaños de dos días, ayer el gobierno de Brasil pidió al Congreso que se reconozca el “estado de calamidad pública” a causa del COVID-19. Y más, protegiendo su rostro con una mascarilla, el propio Bolsonaro apareció junto con su gabi­nete para solicitar la amplia­ción de fondos, que servirá para combatir la pandemia.

“Las medidas necesarias para proteger a la población del virus que ralentizan la tasa de contaminación y evitan el colapso del sistema de salud también implican inevitable­mente una fuerte desacelera­ción en las actividades econó­micas. Es innegable que, en Brasil, las medidas para hacer frente a los efectos de la enfer­medad generarán un aumento natural en el gasto público, que antes no era previsible en la realidad nacional”, expresó Bolsonaro, según Folha de San Pablo.

TEST POSITIVO

Dos ministros del gobierno del presidente brasileño Jair Bolsonaro dieron positivo al coronavirus: el de Seguridad Nacional, Augusto Heleno, ex comandante de las fuerzas de la ONU en Haití, y el de Minas y Energía, Bento Alboquerque, informó AFP este miércoles.

“Informo que el resultado de mi segundo examen, rea­lizado en el HFA (Hospital de las Fuerzas Armadas), resultó positivo. Espero la contraprueba”, escribió por la mañana en Twitter el general retirado Heleno, de 72 años.

Otro alto representante del gobierno brasileño que, según un comunicado oficial del Poder Legislativo, contrajo el COVID-19 es el presidente del Senado de Brasil, Davi Alco­lumbre. La información aclara que Alcolumbre no presenta síntomas graves y permanece aislado en su hogar. Tras el viaje realizado a los Estados Unidos, el gabinete del presi­dente Bolsonaro ya tendría 16 funcionarios con corona­virus. Oficialmente hay 11.278 casos sospechosos, 1.841 des­cartados, 428 confirmados y 4 muertos.